No sé muy bien cómo empezar este artículo, quizás diciendo que voy hablar sobre videojuegos, sobre esa industria que genera tal cantidad de dinero que ya le gustaría al cine o a la música. Pero ante joyas como de la que voy hablar a continuación, ¿quién se puede resistir? Yo no. Bien, ya he dejado claro que los videojuegos son una de mis pasiones, y por ello os voy a contar algunas cosillas de uno de ellos, y seguramente no será la última vez que os hable de alguno.
El videojuego a comentar es Dead Space desarrollado por Visceral Games y distribuido por el gigante Electronic Arts (EA) Lo podemos encuadrar dentro de los géneros de acción, shooter y aventuras con una temática volcada hacia el terror. En definitiva, estamos ante un survival horror, pero no uno cualquiera, sino uno de los grandes que se ha hecho un hueco, merecido por otra parte, en el mundo de los videojuegos. Y la pregunta es ¿por qué? Intentaré dar una respuesta convincente y que espero que anime a quien no haya jugado a probarlo. Estoy completamente seguro que no le dejara indiferente.
Dead Space no tiene un argumento innovador, por así decirlo. Todo comienza con una llamada de socorro desde una nave minera, el USG Ishimura, y envían a un equipo de rescate entre el que se encuentra nuestro protagonista, Isaac Clarke. Pronto descubrirán que la situación se escapa de lo normal, y algunos pagaran con su vida. La nave está infectada de unos seres terrorífica e increíblemente bien diseñados, llamados necromorfos, al igual que los escenarios de la angustiosa nave Ishimura. ¿Qué ha sucedido?, ¿de dónde vienen esos seres?, ¿qué son?, etc, etc. Un montón de preguntas se empiezan agolpar en tu cabeza y el instinto de supervivencia toma el control, y es normal. Estás en una nave inmensa y siniestra de la cual no puedes huir, tus amigos van cayendo uno a uno, y te enfrentas a una amenaza desconocida de criaturas que al menor despiste acaban con tu vida de la manera más cruel que se pueda imaginar. Y hasta aquí lo que voy a decir del argumento, o mejor dicho, del punto de partida de esta epopeya de terror que ya tiene dos juegos (en el segundo la acción se desarrolla en una ciudad espacial, The Sprawl), y por lo que parece habrá un tercero. No quiero desvelar nada más sobre su argumento, que pese a que no es cosa de otro mundo, como podéis comprobar, si está lo suficientemente elaborado como para crear cierta expectación en el jugador. Y he aquí la única deficiencia (si es que se puede denominar así) que podemos encontrar en este juego, porque lo demás son todo virtudes.
Comenzar hablando sobre el diseño gráfico, que simplemente se puede decir que es espectacular, tanto en escenarios, quizás se pueda pensar que pueden llegar a ser repetitivos al estar en una nave, decir que este sería un pensamiento erróneo, y ya no digamos en la segunda parte que ya no estamos en el Ishimura sino en una ciudad, como en las criaturas o el mismo Isaac Clarke. Gracias a ello la inmersión en el videojuego casi total. El otro casi viene dado por la música, que la hay, aunque no demasiada, pero bien avenida, como suele ser habitual en estos títulos, y sobre todo por los sonidos y ruidos extraños amén de una iluminación fantástica que te las harás pasar canutas viendo sombras y luces parpadeantes que te volverán paranoico e esquizofrénico perdido al igual que Isaac (más de una vez sufrirá alucinaciones, algunas de ellas memorables), pero que harán el deleite de una inmersión completa en un mundo desgraciado donde tú eres la única esperanza, un ingeniero de estructuras espaciales, ese eres tú. Y aquí radica el punto clave del juego y también una justificación, por una parte, de que tus movimientos sean torpes, pese a que en la segunda parte todo gozará de más dinamismo ya que también se enfocó el juego, un poco más, hacia la acción, pero que sigue manteniendo la esencia de Dead Space, eso sí, en ambos las cinemáticas son increíbles. Y por otra parte, las armas que podrás emplear para hacer frente a la amenaza de los necromorfos.
Las armas a tu disposición (variadas y para todos los gustos, y que además podrás ir mejorando gracias a los denominados nodos de energía) no van a ser las usuales, que también las hay, pero no son las que priman, ya que no eres el típico soldado, marine, o cualquier otro especialista, digámoslo así, que tenga un buen manejo de las armas. Sin embargo, si tienes conocimientos sobre ingeniería, y sí sabes utilizar ciertas herramientas, que si bien no están diseñadas para ser empleadas como armas, cumplen su función como una de ellas, e incluso mejor. Y lo pasarás terroríficamente bien cuando empieces a utilizarlas y compruebes como mutilan y cercenan a tus enemigos. Si si, habéis leído bien, mutilar y cercenar, porque esa es la única forma de acabar con tus enemigos o en su defecto pisotearlos o descerrajarles un puñetazo hasta que estallen en sangre, sea como sea, seguramente te darán algún/os ítems (botiquines, munición, registros de video o sonoros, etc.) prueba de que su vida llegó a su fin. Dichos ítems los podrás visualizar en un menú 3d sin tener que salir de la pantalla de juego, todo un alarde de buen hacer. Olvídate de disparos precisos en la cabeza o disparos en el pecho, eso no surtirá el efecto que podrías esperar en otros juegos (maticemos, en todos los juegos). Aquí hay que destrozar a los “bichos” literalmente, los hay que descuartizar para que ellos no te descuarticen a ti pese a que lleves llamativas armaduras espaciales estas no te protegerán lo suficiente, y la experiencia es desagradablemente divertida.
Estamos ante un videojuego oscuro, visceral, angustioso y desafiante, que te pondrá al límite de tu resistencia mental. Que si estás jugando con un compañero (te hará la experiencia más llevadera, os lo aseguro) a tu lado, estarás deseando pasarle el mando para que juegue y poder relajarte unos minutos, porque la tensión es máxima. Sin embargo, no podrás apartar los ojos de la pantalla ya que estás totalmente dentro de la piel de Isaac Clarke y su vida es tu vida y sus paranoias son tus paranoias. Incluso cuando dejes de jugar y oigas algún ruido extraño o te veas envuelto en la oscuridad no podrás evitar pensar que quizás los necromorfos no sólo estén en el espacio.
Para finalizar tengo que decir que si después de haber leído esto no os apetece jugar, es que estáis como putas cabras, o no? Sería una pena que pudiendo jugarle y ser un aficionado a los videojuegos no probar un poco de la esencia de Dead Space. Y también que no tengáis miedo de si os va a tirar o no en vuestro PC, lo más seguro es que os vaya bien ya que sus requisitos no son exigentes y con un PC de gama media podréis jugar sin problemas (otro punto a su favor, su optimización)
Hasta aquí esta apología. Podría contar muchas más cosas pero no quiero extenderme más de lo debido, y creo que con lo que puse se puede tener una idea bastante clara de lo que es Dead Space, un gran juego.
Gran presentación para un gran juego. Solo añadir que para mi hay 3 juegos que son arquetipos perfectos de sus generos: Final fantasy, Metal gear y el tercero antes Doom empieza a ser sustituido por este...veamos que nos depara el trcero para decidir.
ResponderEliminarHe intentado trasnmitir que estamos ante un juego ejemplar, trabajado, bien diseñado... y otros muchos calificativos, todos ellos positivos. Estimular la curiosidad de los lectores y seguidores para que lo prueben. Y si, coincido contigo, Minos, en que podría ser un digno sucesor de Doom en el género. Sin embrago, Doom no ha dicho su última palabra ya que esta en desarrollo Doom 4 y promete volver a revolucionar el sector. La espera se hará eterna pero seguro que merece la pena, o eso quiero pensar.
ResponderEliminarSi yo queria cuantificar su gtrandeza poniendolo casi al nivel de esas bestias que comente, por eso lo dije vamos.
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